No hay sitio en la noche
donde esconderse
ni forma de huir
de las propias huellas
No hay lugar a donde ir
ni paso atrás a donde volver
Mañana es un abismo
interminable
Ayer un espejismo
irrepetible
La palabra entregada
ha muerto
yace aún caliente
en la inconsistencia
en el silencio
A veces no puedo diferenciar
entre la oscuridad y la luz
mientras vivo esta muerte
mientras lamento mi suerte
Saltaré
Mañana saltaré
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